Huye, Sube y Vuela

Ayer empecé a meditar (si no tenía mi música, lo mínimo que podía hacer era ocupar mi mente en algo bueno) y empecé a caminar rápidamente con los brazos doblados ….empecé a pensar en lo que está sucediendo en mi vida, en cuantas cosas quisiera que sucedieran,  en que a mi edad ya no se usa eso de huir o andar nada más y no solo lanzar pliegos petitorios para que sucedan dando de tumbos

Por venir meditando me equivoqué de ruta y acabé tomando una mucho más larga, por venir meditando no me di cuenta que ya no estaba caminando, tenía media hora corriendo y pensando, de la forma más orgánica, en el más torpe seguramente de los estilos

Me di cuenta del amanecer, del cielo aún con tintes nocturnos como se tornó morado con toques anaranjados al horizonte y como si fuera un escenario con efectos especiales cambiaba al azul.  Me dí cuenta de la gente paseando a sus perros, de las nubes en forma de perro, de los perros en forma de nube, de las aves que bajan a dormir en el cable de los postes... cómo una de ellas levantó a la de al lado y de repente, como si todas fueran a un desayuno puntualísimo, se despertaron y elevaron el vuelo.
Volar: el sueño de los hombres y de las aves heridas.
Está claro que no podemos pasear personalmente entre las nubes del firmamento, a veces andando en el suelo uno tropieza aunque no traigas tacones, pero quiero pensar que podemos correr y elevarnos aunque sea un poco o por lo menos creer que elevamos el estado de ánimo, saber que correr no es precisamente porque estemos Huyendo aunque nos rompan el corazón o tengamos que dejar ir a alguien; simplemente asumir las consecuencias de tus actos aunque no seas Judas que si no tienes temple suficiente o sapiencia es quizá porque ere humano,  lo que uno hace no es ninguna traición a quien mas quieres por tomar ciertas decisiones. si hago lo contrario me traiciono a mi misma...