Siempre imaginé que las princesas debían ser preciosas muchachitas que viven encerradas en un castillo. Siempre con un vestido elegante, tal vez con pelo de tirabuzones y grandes e inquietos ojos. En el cuento siempre unas están esperando a que lleguen a despertarlas o rescatarlas ...
Antes de llegar a esa puerta pesada y apretar el botón de la especie de ascensor...caminó en zig zag por lo mismo de su costumbre por las circunstancias, la constante contradicción de no ir en linea recta.
Muy sigilosa y al mismo tiempo confiada acercó su dedo al botón, se sonrió y el apareció ante ella, para cuando estuvieron a 3 cm de cara recordó que toda la galaxia había desaparecido. En mi caso seguramente habría recordado que yo era miope y que me faltaban las gafas, eso es tanto como un presagio tirado por los nervios, seguro moriria de nervios, pensaría si luciría bien mi cabello o si mi vestido o traje no se vería arrugado.
Lo imprevisto y el pesimismo que siempre me llevo por el lado cómico a veces me hace dar traspiés pero es que la perfección no existe.
Yo siempre tengo a alguien que galopa dentro de mi corazón que no usa nave ni tiene un corcél blanco, él va en camioneta... Leia dentro de su traje blanco me hace pensar que aunque son lindos, yo nunca he querido un vestido de novia.
Alzo el cuello tan alto, como si ya fuera imposible parecer más alta que con las zapatillas, el golpe de suerte es que en otras historias se te pierda para que él te encuentre. Todo en ella es movimiento y cadencia aunque se sabe especial, ella actua simple, y no pasa desapercibida porque no es una chica cualquiera...
Cada mañana con el mejor semblante, arreglada, (dicen todo está en la actitud). salgo a enfrentar el mundo y siempre pienso que en las historietas de pocas páginas, uno siempre debe ir preparada para cuando llegue la oportunidad y se atraviese el telón. Ser vulnerable se presenta porque el mejor sueño o aventura sufre rasgaduras y cualquier criatura mortal lo padece. Me pongo a escribir en un nuevo papel cada día, siempre finales y tramas distintos pero con los mismos protagonistas.
No hay tiempo de verificar si el sueño es real, olvidé pellizcarme. Bueno, lo evito no sé si ya desperté, me rio del trajecito raro que traia que se me veían hasta las amígdalas, no tengo galaxias que defender ni reino, soy tan simple y mortal, que uso el cabello suelto porque si me peino como leia me doleria la cabeza...
a veces trabajo y parezco esclava apenas caricatura o la sombra de una princesa pero, eso sí, creo que tendré que ir por mi Han para que no ande tan sólo, aunque no sé si somos la peor pareja del Universo.