Estaba leyendo que si estamos tristes o lloramos, a nivel neuronal, se incrementa el consumo de glucosa y oxígeno en el cerebro, por ello cuando lloramos incrementamos la frecuencia respiratoria; y que es ésta la respuesta emocional que más rápido se auto limita ( minutos de llanto cansan mucho al cerebro).
Cuando murió mi Padre, ese día de Agosto, justo después, de todo ese trance del sepelio y ver gente por todas partes cayó una tromba terrible y solo pensaba en èl, que se había quedado bajo tres metros con toda esa agua por encima
El decaimiento moral siempre lo he resuelto yendo a correr pero, creo que el clima extremoso no ayuda,emos mal que a mis casi 50 años ya no me aporrean tantas hormonas.
Dicen que la tristeza se vuelve cómoda; si no esperas nada, no tienes que hacer nada, ni matarte, a estas alturas y por como va el mundo ya hasta se ve mal .
Estar triste, con el menor esfuerzo, es patético, pero seguro que cómodo para algunos. Un amigo tiene una enfermedad terminal y todos los lunes voy a asistirlo y a hablar con el con todo y las circunstancias jamás lo he visto derramar una sola lágrima, en cambio yo, cada que vuelvo a mí casa si no me ocupo la lloradera épica hace aparición, sintiendome fatal. Hoy entre los contrastes estoy que para ponerme triste, nada más me hacía falta un pellizco. Seguro dirá alguien con la misma inteligencia emocional que mi amigo, que el tiempo perdido en tristezas, se nos pasa la vida y entonces es cuando volteo y nace un bebé en mi familia y aunque me hagan tía abuela en un pis pas, sonrió y pienso -¡que tristezas, ni que nada.! :)