agosto 08, 2023

Anecdotarios de Lectura

agosto 08, 2023

 En la juventud, la literatura entusiasma; en la madurez, cuestiona; en la vejez, consuela. En todas las edades es un engaño, uno de los más felices engaños que hay hasta que entiendes que leer no hace mejor a nadie, pero sí peor. 

No he logrado aprender a deshacerme de los libros sin mayores tragedias y no porque me lo dice Marie Kondo :)   alguna vez,  tuve que  lamentar algún ejemplar perdido, por prestarlo,  pero con el tiempo se aprende que, esos títulos regresarán a uno mediante caminos inescrutables, como dicen los creyentes que obra el Señor.   

Tuve ciertas manías como dejar sin leer algún título de un escritor admirado por una feliz superstición; más de una ocasión me he negado a releer un libro que allá lejos y tiempo atrás resultó mágico como quien decidió no volver al lugar donde fue feliz;  y creo que me he burlado de alguien en especial cuando corre a ver el  nobel para llegar a su Fb y tomarse fotos con sus libros recién comprados porque eso le da muchos  me gusta.

Terminar lo más rápido que se pueda un libro para empezar el siguiente: si es excelente, porque es excelente y pide ser leído de una sentada; si es malo (pero legible), para despacharlo y poder empezar algo bueno

Leer rápido y mal lo que se tiene que leer por trabajo para poder leer lo que a uno le da la gana, por ser de la vieja guardia y no leer lo que todo mundo le recomienda porque se puso de moda.


Sería triste,  ir a una librería y darse cuenta de que ya ninguno de los ejemplares en la mesa de novedades representa un misterio o una invitación;  regresar a casa para descubrir que uno tiene el misterio, acumulado y ya casi arrumbado, en la mesita de noche de la recámara, en forma de pila  y con el envoltorio plástico intacto




11 solo lo soñaron:

Noelia Cano dijo...

Más que a una librería, me gusta ir a una biblioteca y sacar algo totalmente fuera de mi zona de confort. He encontrado auténticas maravillas con este "juego".
Libros sí he perdido por prestar y luego ni recordar a quién, ¡no aprendo!
Besos.

Tatiana Aguilera dijo...

Tengo una librería cerca de casa donde siempre encuentro algo que me provoca tocarlo, sentirlo y leerlo. Soy táctil y todo me entra por el tacto. Me encanta cuidar mis libros, sobre todo aquellos que son especiales por su contenido y, porque me han acompañado en etapas cruciales de mi vida.

Besos Jo

Carlos Augusto Pereyra Martínez dijo...

Leer es un jercicio no fácil. El problema empieza con la misma escuela. NO enseñan a leer, sino a mecanizar. Si enseñaran a leer bajo la consigna de que leer desde la comprensión forma sujetos que toman decisiones. Indudablemente hay categorías de lectores: los que lo haen por pasar el tiempo, los que leen por snob, los que compran libros para mantener intsactos los libros en la biblioteca, porque esta hace parte más de la decoración. Leer como lo aprecia Nietzche es un combate con el libro, para desemtrañarlos, hacerlo objeto de la crítica, por eso es tan f¿difícil que los lectores viscerales sean una minoría. UN abrazo. Carlos

Chaly Vera dijo...


Hace mucho tiempo que no leo nada
creo que ya lei todo lo que tenia que leer

En las epocas que leia
tres libros, tres autores y tres tramas diferentes
y brincaba de uno a otro, cuando el tema me cansaba

Que algunos libros los he releido?
Si, cien años de soledad, seis veces
Ulises..., cuatro
La Biblia..., mil veces

Ahora ya no leo libros
uno que otro articulo
de revistas especializadas

Ahora escucho musica...
Besos

Alfred dijo...

Todo eso y más, es nuestra relación con los libros. ;)

Besos.

TORO SALVAJE dijo...

Regalé todos mis libros físicos.
Ahora todo lo tengo en libro electrónico donde no se posa el polvo ni amarillean las páginas.
Si un libro no me engancha de un clic desaparece y voy a por el siguiente... no hay que perder el tiempo que lo tenemos limitado.

Jose Casagrande dijo...

Vaya dan tanto lio los libros que recordé que al quijote precisamente se le seco el cerebro de tanto leer.

Yo pues voy a quemar los pocos que tengo en mi casa, no quiero que me hagan algun daño esos objetos malignos.

artur dijo...

Una buena lectura, no pienso que pueda producir mal alguno...aunque hay libros i libros !.
Leyenedo , siempre tendràs una vista más amplia que no hacerlo, un punto de vista distinto te hace reflexionar sobre tus propios pensamientos.
Bien por los libros !!
Salut :)

Beauséant dijo...

Creo que moriría por dentro si me pasase eso que comentas al final, llegar a una librería y no encontrar nada que llevarme a los ojos...

Muy buena reflexión la inicial, la literatura como engaño, como trampantojo que ponemos ante la realidad. Cuando leo un libro puedo ser cualquier persona, pura magia, sí

Un abrazo

Elliot dijo...

Me identifico. Tengo muchos libros y ninguno que yo pueda librarme. No sé. No soy capaz de dar nada a nadie y menos cuando se trata de un libro. No obstante, eso me recuerda que compré dos libros de Stephen king y están ganando polvo en el estante. Supongo que algún día tendré tiempo (paciencia) para leerlos.

Sergio dijo...

Me identifico mucho con ese párrafo en el que dices que quieres acabar rápido un libro malo para pasar al siguiente y quitarlo del medio y uno bueno porque se lee de una sentada. Sea como sea yo también acabo devorando libros y también sé que serán mi consuelo final. Como dejen de interesarme no sé qué voy a hacer. Creo que no tengo alternativas. Es lo que más me gusta. Más que el cine.
De todos modos sé que no les perderé el gusto. Leer mucho me ha llevado a tener más libros por descubrir. Unos autores te hacen conocer otros. A veces pruebo algo nuevo en la biblioteca y si está entre lo que más me gusta pues ya lo compro.
Me gusta leer un libro sabiendo que tengo otros dos o tres pendientes. No me vale acabar un libro y quedarme con las manos vacías. Saludos

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