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Dice Maya Angelou que uno puede descubrir mucho acerca de una persona, si te fijas en como se enfrenta a cosas tan sencillas entre otras, como perder el equipaje, un día de lluvia o una ristra enredada de luces de navidad.
No sé si yo me he complicado lo suficiente, pero las navidades en casa de mi madre con el tiempo, son reconfortantes. Y es que hablar las cosas ayuda, porque uno evoluciona. No somos nunca los de antes.
Uno debe soltar cosas como equipaje innecesario para disfrutar el presente.
Pienso mucho en mi mamá, que hasta este punto reestructurada mi relación con ella y despues de muchos tropiezos se ha afianzado.
Despues de unos años de irme de casa, papá murió y menos volví de visita, con mi hermana todo fue a mal y se magnifican cosas a veces ridiculas que no entro en el enredo.
No hace muchos dias alguien me dijo, que vivir sola habría sido una decisión por mi rebeldía. No, la rebeldia no tiene que ver con eso. La razón de irme fue incomodidad, eso es lo que hace que te muevas de los sitios.
Tener que salir de donde no te sientes parte duele mucho y cuesta trabajo, pero con el tiempo ese dolor cambia. Entendi que no habia mejor sitio para mi hermana con sus hijas bajo el cobijo de mis padres y el tiempo coloca las cosas en orden. Nunca sabré que habria pasado si me hubiera quedado ahi.
Las ristras enredadas que encendian alertas fueron menguando y yo me adapté al mundo a mis 24 años. A veces dire que hay cosas que no me gustaron hacerlas sola, lloré la.primera noche, pero pude establecerme, la soledad te hace adaptarte a tu propia independencia. Sabes que para hacer las cosas te tienes a ti y solo.de ti depende. Cuando entiendes eso, te sale mejor la vida abrazando a tu madre cuando puedes hacerte cargo haciendo la cena y eres la visita en plena Navidad.
4 solo lo soñaron:
Uno cree que tiene un mundo de cosas que perdonar, luego ahí están las voces, los olores, las risas las presencias
Se que cuando ella falte seguramente no podré volver a pisar su casa. Aunque espero que falte yo primero y atesorar conmigo ésta y las navidades que nos falten
El mundo de las relaciones familiares lo hacemos complejo, cuando debiera ser de una sencillez extrema. Tenemos la manía de complicarnos la vida, por cosas que el tiempo da razón de su verdadero valor, que suele ser nimio.
Hay que aprender a caminar solo, pero saber a quién dejamos atrás.
Con el tiempo, todo madura a su ritmo i se ven las cosas desde distinto prisma... quizás sea eso, la madurez, no sé ... pero afortunado quién consigue rehacer puentes caídos, como el del escrito.
Abrazitos ;)
A veces, sobre todo en familia, es complicado detectar esos puntos de dolor, de incomodidad. Como has crecido con ellos los ves normales, hace falta tomar aire, salir al exterior para entender que existen otras alternativas.
A veces las familias son mejores cuando guardan las distancias, eso es algo que he tardado en entender ...
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