Llegar en Tren a Grand Central de noche es como el viaje de los musulmanes a la meca, o los ciudadanos del mundo que hacen camino a Santiago de compostela. por una vez en la vida hay que ir a darle una mordida a la gran manzana. El tren entra a manhattan por debajo por un túnel sumarino, y se para en medio de una estación subterránea que es mas grande que Siberia a media noche parece tener mas tráfico que a medio dia. Puestos de periódico que parecen residencias y tiendas de todo tipo de mercancías.
El mármol de los pisos y el bronce de los Barandales tienen la apariencia de opulencia vieja pero no tanta para verse amontonada como en europa. La recepción de toda ciudad que le da a los vsitantes siempre creo que es un poco dura.
Abundan kioskos y se pueden hallar miles de datos de hoteles cercanos, actividades culturales, sitios para beber sólo café y mapas. Escoger uno con logo cincuentero a veces es garantía de que no tengas que vender tu riñón para pagarlo.
Caminar por sus calles ahora permite andar un poco como peli de Woody Allen, aunque en la decada de los 70`s no se podía decir lo mismo. Los aromas de esta ciudad son características: la brisa marina de mar que todo el poderoso concreto que le rodea no ha logrado aniquilar y las castañas asadas del carrito banquetero. No te pierdes por la nomenclatura de las calles todas de este a oeste subiendo por numeros. Avenidas de norte a sur y aun imponen los rascacielos que no es díficil asombrarse con la altura.
Flipando y queriendo saltar y subir en cada azotea. Te digo Adiós NY. "Ojalá que volvamos a vernos"
13 solo lo soñaron:
Hay de todo como en un aparador. La barra del Cosí parecido a un subway eligiendo desde el pan y con que habrás de rellenar.
en Ny los martinis son la bebida por excelencia mejor servida
el window shopin superficial y deliciososa
la calle entera que huele a galletas entre la 2da y la 11
entrar en SoHo (South of Houston), ese barrio encantador del cual la Condesa llega a ser una mala versión, mirar la museografía perfecta en galerías modestas y asomarse a de los escaparates de Prada y de MacStore que, aún cerradas, hacen las delicias de chicos y grandes
torres altas e derrumban pero no pueden contra una ciudad.
Aww que envidia Jo, yo solo he conocido Los Ángeles y algunos alrededores pero mi deseo es conocer al menos otros 3 destinos de USA (Chicago, NY y San Francisco) y quizá termine conociéndolos a través de las fotografías y las letras que ustedes nos comparten, nuestros contactos de todas partes del mundo.
Y a regresar, y me invitas =P
Hay viajes que jamas se olvidan...
Muy buen tour que hiciste.
Y un tour por NYC no sería el mismo sin la voz de Sinatra.
Veo que te lo has pasado genial y te ha encantado la ciudad, me alegro mucho. Un besazo.
El lugar (como un personaje más) es parte de la memoria colectiva, pero su esencia habita en las personas que circulan por sus calles y recorren sus edificios.
Pueden herirlo, pero no matarlo.
besos
Que bonita tu entrada, con la música de Frank; durante un segundo ha sido casi como estar allí, si miras las fotos, escuchas y te olvidas de que es en realidad la pantalla de tu ordenador.
Un beso!
Muchas gracias, Jo, por tu comentario en Boherase; me ha dado mucha alegría!
Un beso!
deliciosamente descrita... hasta ganas me dieron de volver y detenerme a oler..!
Saludos.
conocer otras ciudades nos enriquece como seres humanos bastante.
me too..
Luego ando por aquí y también por allá pero sin tiempo para bloguear.
Te mando un beso y diviertete mucho...si vas acompañada portate bien...si no, pues no dejes pasar la oportunidad, no es que los gringous me encanten pero alguno a de haber que no este de mal ver y de mal saber.
Abrazos...
tiene que ser una maravillosidad caminar por allí, dejar que la ciudad te engulla. ah! algún día iré, lo juro!! te dejo un vídeo:
http://youtu.be/bJkymylTNU4
mm manzaaana...
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