No me identifico con esas super mujeres que llaman la atención, creo que aún cuando nunca lo hubiera preferido soy de esas que pasa desapercibida fácilmente. No me dejo llevar por el eximio o el adjetivo insulso, odio los clichés que muchos dictan o se recetan por la moda y buscan ser reconocidos usando marcas, oliendo a diseñador o andar teñida de un tono en la ropa o en la cabellera.
Entre los dramas de la vida cotidiana creo que los mios comparados con otros son de región 4 vivo en un País donde la violencia está hecha un caos y no necesito contar más aunque me dedique a la Publicidad... No hay realmente algo que cambie el story board, yo no luzco perfecta últimamente porque creo que alguien se ha encargado de dibujarme ojeras y además no tengo sonrisa colgate aunque ultimamente hay simples cosas que me hacen reir y me reafirman una constante manía por ser testigo sobre lo que el verano va colocando a su llegada.
Hace tiempo Elijo caminar despacio, orgullosa un tanto distraída y a veces desganada, acompañada de ellos fumando, enderezada por lo tiesa de estar sentada tanto... contenta o cabizbaja ensimismada o bajo la lluvia, muchas veces sola nunca Altiva, acelerada siempre... y una que otra vez descalza como si fuera una niña cuando nadie me ve sobre la alfombra de la oficina.
Llueve Afuera y yo sucumbo a empaparme... este clima con tanto torrente esta para refrescarse y arruinarse el atuendo y los bucles. El Verano con todo su poder ocasiona que el alma se derrame y rebose y extrañes. El verano tiene ese toque de ponerte melancólico, querer pasarla acompañado retozar en un sofá bajo una frazada, leer libros oir discos y por mucho soñar un poco más al compás del tipeo de el agua que cae.
Hasta
en el día más soleado el pronóstico advierte de cierto riesgo de
precipitación, se desenrosca el recuerdo de andar bajo la lluvia y no
basta con abrir los ojos y mirar para convencerse que la realidad es el
más auténtico de los milagros al ir caminando cuando el sol se ha ido a dormir
Antes brincabas sobre los charcos, ahora por guardar cierta compostura y por no sufrir una avería o un esguinze los sorteas.
Antes brincabas sobre los charcos, ahora por guardar cierta compostura y por no sufrir una avería o un esguinze los sorteas.
Los dias nublados de Verano me gustan y los disfruto aunque mas de una vez me hacen llorar.
Extraño masoquismo
11 solo lo soñaron:
Hoy me voy a dormir mientras llueve afuera mientras yo quiera llover por dentro mientras el, duerma afuera... sin mi
No brincas los charcos porque ya eres una mujer hecha y derecha!!! que escribe de manera maravillosa...me parece que tu crees que pasas desapercibida..pero no creo que sea asi..una mujer fuert e, guapa y con lindos zapatos siempre llama la atencion..
Pues yo creo que de vez en cuando hay que volver a pisar los charcos, a romper las convenciones y a lucir hermosa y no pasar desapercibida; regalarte un poco de seguridad y autoestima. Y está claro que eres fuerte, bella y decidida, solo que todas, en algún momento, nos sentimos débiles, vulnerables o mal queridas.
besos
"Llueve en mi corazón. Como llueve sobre la ciudad",
dice Verlaine.
Y a veces así pasa, pues la lluvia tiene esa particularidad de ponernos melancólicos, tristones. Me gusta que llueva peor la verdad no me gusta empaparme.
Para mí, los días nublados del verano son los mejores días nublados de todo el año.
Será por el contraste, no lo sé, pero se recibe algo que se necesita cuando todo se confabula para que no lo tengas. Y eso es lo que me gusta.
besos
porque sera que la lluvia inspira, solo cuando llueve me nace escribir cursilerias, algo tiene que trasforma, por lo menos aquí en mi tierra disfrazada de ciudad cuando por dentro vive un desierto.
A mi me encanta la lluvia, pero la última vez que la he disfrutado no he salido a saltar charcos sino que me he quedado mirando y escuchando, como si ya no fuera el protagonista sino un simple espectador.
Un saludo.
Aquí también llueve, y si como dicen después de llover el agua se evapora y va las nubes para en otro lado volver a llover, ponte atenta que un poema de amor y amargura, unos besos y dos abrazos marrones van en camino para ti…
Dudo mucho que pases desaercivida con esos perfectos zapatos que te ayudan a marcar el paso firme a y andar por ahí, podrá ser masoquismo pero ah como se disfruta el desahogarnos mientras la naturaleza parece hacer lo mismo mientras no para de llover.
Podrá estar hecha un caos la ciudad pero el que puedas ser consciente de todo y aprecies entre lo malo y lo bueno te hace no solo ser espectadora de una realidad, si no cómplice del cambio que ésta pudiéra tomar.
Bueno coincido con todos arriba, los días lluviosos son los mejores, tu post, bueno en sí ya lo estaba, pero me puso muy melancolica, ver a las personas correr bao la lluvia, escuchar el interminable caer de las gotas y bueno pensar en aquella mujer que pasa desapercibida y yo creo que ese tipo de mujeres son de las más especiales porque la vanidad no las opaca, pero bueno igual una debe tener seguiridad e sí misma, es lo más importante, y bueno serán varios días de seguir encerrados en la melancolía y esa espera de un algo que siempre trae el verano!
Un gustazo leerte!
daría todo por intercambiarte tus días lluviosos y nublados de verano por estos 45 grados de viento caliente sobre mi cara, parece el tufo del diablo, lo juro... y estoy empezando a enojarme.
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