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En un lugar solitario cuyo nombre no viene al caso, hubo un hombre que se pasó la vida eludiendo a una mujer concreta.
Sueña que la ama pero la mujer huye. El hombre envía a su persecución perros amaestrados esclavos de su deseo. La mujer cruza un puente, sobre un río, atraviesa un muro, se eleva sobre una montaña, Divisa un lago y cuesta abajo acelera el paso
Los perros atraviesan el río a nado, saltan el muro y al pie de la montaña se detienen jadeando.
Cuando despierta, la mujer está a su lado y el hombre descubre decepcionado, que ya es suya. Existen hombres que incluso saben despiertos, que jamás podrán alcanzar a la mujer de sus sueños ni corriendo maratones...
Es confuso creer que a quien esperas o quien sueñas, es quien te quiere encontrar o al menos, correr aunque no sea detrás de ti pero por alguna razón lo encuentras sin perseguirle.
12 solo lo soñaron:
Él no me persigue, pero tampoco me ignora...
No entiendo esa decepción.
Hmmm. Yo, al despertar, le abrazaría.
Últimamente el que huyo soy yo.
No lo hubiera creído nunca.
Besos.
A veces el mayor sentido que le damos al amor es la conquista en sí misma. Un besote!!!
...la decepción de no poder perseguir a alguien es bien grande!!
Perseguir a alguien es parte del encanto de estar enamorado. Tenerlo a lado disminuye la pasión con el tiempo, pero no el amor
Seguimos andando, corriendo y lo que haga falta.
saludos.
Esos sueños son los que mueven al mundo :)
¿Para qué huír? A menos que esté feo digo yo.
Besote
las concreciones se antojan complicadas en un mundo idealizado. los ensueños, a menudo, nublan la vista.
Es mejor abrazar y que el deseo haga lo que busca, aunque muchos prefieren huir, como lo hace el chaval...
Un abrazo rápido de esos, que solo duran toda una vida.
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