Men Fashion Freak

Me confieso fanática de la belleza masculina y no sólo lo fisico es lo que cuenta y es así como algunos solo se cuidan de todo tan concentrados y cautelosos diciendo algo o actuando y resultan un fiasco.

Soy Afortunada sin proponérmelo, tengo la fortuna de conocer un puñado de hombres estupendos entre ellos blogueros. Algunos más fuertes, más necios, tan vanidosos como yo y en ocasiones igual de predecibles o quebradizos, inaccesibles rudos o sensibles. Paradójicamente me enseñan el lado mejor de ser yo 

Ya no hago caso de esas diferencias históricas que se imponen, se que hay de esos inteligentes, sensibles y cuerdos, seguramente habrá alguna feminista de hueso colorado que dirá que esa alquimia no es posible, pero también he hecho otro descubrimiento con el tiempo, en este menestér de escribir, entre líneas más de una vez .  De pronto descubres a alguien que es obsesivo, compulsivo, analítico, pulcro en extremo pero desparpajado y sincero, un tanto travieso sacándole fotos a guapos callejeros y hasta mas cuerdo que cualquiera llenos de encanto como de niño aunque el asuma que no le gustan solo los de 30 para arriba y seguro el le gusta a todos.

Este hombre me hace soltar una carcajada o me educa yo tan neofita en música, me hace pensar con ciertas postulaciones y conocer lados masculinos.  Casi podría decir, y no dudo de lo arbitrario de mi observación, que he leido sus cosas y he observado su actitud descubriendo entre conversaciones y lineas las cosas mas iluminadoras, en estos espacios virtuales. 

Tal vez lo que consideramos bello varíe con el tiempo y los gustos, antes decían que un hombre debía ser feo, fuerte y formal y eso les permitía descuidarse y dedicarse a actividades menos frivolas pero quien dice que no se pueda conjugar ser distinto y vanidoso por el gusto de sentirse bien.  A Toño lo he visto quebrarse en fragmentos diminutos y rehacerse  a veces  con pura furia y sarcasmo simpático y entre sus argumentos de abogado, puede reir como niño de si mismo e inclusive ser de lo más espóntaneos, Jactandose de alguna hazaña en el trabajo, en un viaje o en algún sueño por conquistar a  alguien, desbordarse de emoción, de amor, de pasión de imaginería pura cuando entre líneas ventila algo o descubro poco a poco ese sentido de su vida. 

Gracias a el sé que las personas enfrentan también exigencias que no se ven pero que resulta básico: su capacidad para comprender y responder a las necesidades que luego el mundo trae de sorpresa en sorpresa. No importa la condición, tu  pretención en la vida y hasta tus gustos o preferencias.

Toño gracias 

¿a poco no parece discurso?