El Hada Verde

La otra noche un buen amigo me contó que la probó en un bar y la prohibieron hace tiempo según sus dichos, porque fué víctima de su propia popularidad.

En el siglo XIX intelectuales y artístas como Van Gogh, Manet, Degas, y escritores eróticos como Rimbaud, Verlaine y Mallarmé en esa belle epoqué, de París se reunían a beber a la hora verde L´heure Verte, en bares de la ciudad, esa famosa bebida que en algunos paises de Europa resucitó hace ya tan sólo unas décadas. En esos tiempos apasionados de antaño donde la creatividad literaria era un boom y la actividad pictórica de los impresionistas ahondaba por esas callejuelas, el Absenta hacía su aparición para inspirar las veladas de los decadentes bebedores de ajenjo al beber su elixir y es que se decía que proporcionaba al que la bebía locura y genialidad atribuyéndole propiedades más allá de una simple bebida alcohólica.

Su particularidad, es la característica tonalidad en verdes que posee, que pueden ir desde los tonos secos como las hojas, verdes pálidos o esmeraldas debido a que es extraída de flores y hierbas maceradas, fermentadas previamente como el hinojo, el bálsamo de naranja o la mejorana...

y anoche recordé la primera vez que tuve contacto con ella - Susan Sarandon en la película Alfie seduce a Jude Law sirviendo una bebida a la que agregaba agua helada sobre un cubo de azúcar, al contacto se hizo blancusca, entre la densidad de la mezcla blanca y verdosa me apuesto que si el cine tuviera ese efecto de poder oler las cosas atravesando la pantalla, el olor de aquello hubiera hechizado a más de uno convocando su efecto ... ingenua pensé que eso lo haría una mujer de mucho mundo con tal de seducir, ya que en dicha materia podemos tener toda la edad del mundo y ser un improvisado en esos temas.

Tiempo después ayudándo en aquel bar me di a la tarea de buscar una buena botella de Absenta preguntando a voces expertas y escuchando todo lo posible acerca de ella...
pero no hice más que estar imersa en un mar de confusiones entre que pedía opinión y me enredaba en el tema (el absenta es la bebida, el ajenjo es la planta)...Yo quería beberla aún no siendo experta ...

y un buen día me hallé apersonada en un sitio, me ofrecieron la serie de botellas dispuestas una Checa, y dos Francesas (acotese que se trataba de botellas de la mentada bebida no estén pensando demás) ... el dependiente sólo sabía hacer referencía de que las últimas harían un buen louche (la consistencia que adquiere la bebida despues de vertir el agua helada.) y hasta entre las recomendaciones busqué hasta recetas, sin temer a los efectos que cuenta la leyenda subjetivamente, como que produce claridad mental aguda, fina extensión de los sentidos, clara sensación de bienestar e incluso una desbordada alegría con la imaginación a tope y la excitación rayando en la locura. Por supuesto eso lo leí en los libros.

y de inmediato no lo pensé mucho. Mas allá de las drogas, al saber sobre esos efectos, no hice nada más que pensar en Sexo y deseché la idea de comprar la botella es como si hubiera pagando una fortuna pero sin disfrutar el plano físico completo (ya saben a que me refiero)... y fué asi como de imediato di cuenta como es simple perder varios puntos a mi favor por creerme lo que ocurría solo en películas y que el Ajenjo era un elixir de amor que sabe a anís, una bebida más que en materia de seducción hoy para mi no tiene mas que una etiqueta:

un trago con pedigree.

bah!