Només es Coneixen les coses que es Domestiquen?

Ayer quise conectarme y lo logré pasado un rato. Algo pasaba con la red y últimamente de la tecnología no me fio, me reservo creer en ella al igual que en el destino.

No sé si fué el frio de la hostia que ya no se ha manifestado, (contradictoria)... extraño el clima extremoso como ese contagiado por la nieve de Europa en el otro lado del charco. Espero con ansia Febrero es donde la lluvía se acompleja muy poco y se empeña en competir bien.

Tanta agua combinada con frío me gusta y aunque suene masoquista me sumerje en nostalgias que ni al caso, pero es ese frío del clima que me permite decifrar mejor lo que siento a veces mucho mejor, que el silencio ...es un modo de acostumbrarse a ciertos momentos.

Hace varios fines de semana ataviados con los climas que describo, casi con desgana volviéndo de el trabajo enfundada en gabardina y casi arrastrando el bolso, al pie de mi escalera de entrada vi un paquetito, mi ansia por abrirlo por poco ocasiona que estropeara el envoltorio, pero respirando hondo y así de a poco con paciencia (a mi que no se me dá) lo logré. sin dejarle rasguños alcanzé a ver un nombre conocido y un sitio lejano

Hoy después de semanas me doy a la tarea de comenzar a leer las frases y a anotar en un moleskine que he comprado especialmente para mi cotejando, probando y destrabando línea por línea de Catalán a Español y viceversa, dibujando en él aunado a lo que se me ocurra. Hay quién dice que esa lengua es muerta y que sería una inversión inútil empeñarme aprender pero para mi eso resulta un argumento de ignorante por algo simple: Yo solo quiero aprender y el Catalán para mi es un reto impuesto por puro gusto.

y definitivamente es cuando digo que corro con suerte. Yo que siempre he renegado de protones y electrónes en virtud de virtualidades que no me habían tratado bien... la bendita tecnología hoy en día resulta imprescindible y sorpresiva.
Como cuando cuando hallé en un sobre el disco y el libro ciento volando de catorce de Sabina y andaba instalada un sábado cansona y fastidiada de una semana muy mala. Una vez más cierta virtualidad se asomaba y la virtud de alguien me tiraba del hombro de forma personal

Ayer con mis Sonetos de Sabina al lado y decifrando El petit príncep de Saint-Exupéry con la luna a mis espaldas...al conectarme de rato en el portátil apareció el cómplice anunciando una predicción, fingí demencia y no demostré emoción excesiva detrás de una pantalla, ¿quién puede darse cuenta?. Poco se decifran sentires a menos que se ubique uno muy bien en el modo de escribir o conforme uno se domestique a una persona.

No pidió le dibujara un cordero pero se interesó en lo que estaba leyendo, confesó que había andado brincando de planeta en planeta extrañando una flor, se quedó conmigo en plan desvelado preguntándo si hoy es posible que existiera ese vínculo sobre la domesticación, incluso en estos tiempos, para poder conocerse bién y si las estrellas se iluminan entre sí, con el fin de que algún día cada uno pueda encontrar la suya.