Amor se llama el Juego

Desde que le conozco todo lo demás ha estado impregnado de él , marcado por una huella imborrable, intensa, en calles y acerados, en bares y cielos de diversos colores. Hasta en mis cosas cotidianas lo conjuro...y aun a sabiendas que mis palabras no tienen ese poder
soplan si acaso pueden prender de nuevo el brio que ese fuego tenía...

... el amor es una totalidad, aunque bien se que no se puede vivir en función de él...es una constante lucha de encuentros-desencuentros, de pelea- y reconciliación, es decir de altos y bajos pero siempre con sentidos compartidos coincidentes muchas veces envuelto en ilusión.

Una mezcla de ceder y quitar, estirar la liga y aflojarla cuidando de no romperla
uno a veces gana y el otro pierde quizá uno siempre pierda todo el tiempo, pero el que gana puede pararse un instante y dejar que el otro vuelva al juego. Esta vez el amor tramposo me ha colocado hasta el otro extremo del tablero.

El amor nos invade ...en las aceras, en las calles, en la luz del alto, en los bares, en el cielo, en los cines, en los autos, en el radio, en las tiendas, en el subterráneo, en la red, en la caseta telefónica ...pero, y ¿el estupido cupido dónde está?¡

A veces las personas se alejan del afecto humano. sin planearlo, No puedo ya recordar algún tiempo en él que me haya sentido necesitada. ¿El amor es rojo?...Pues yo soy daltónica

Apenas quisiera recordarlo, pero se que el amor es como un lugar desértico y cristalino como un lago... o con una orilla como la que tiene el mar... y a veces solo es alcanzado por la fe humana porque se vuelve escurridizo. Es como un viaje, y no tengo un mapa para el por el momento

yo quisiera conocerlo, mejor dicho reconocerlo, alguna vez fui anarquista y también quise dejar de saber sobre el por pura salud mental. Pero sin él me siento un poco desarticulada y vacia
sin una madeja que pueda usar para tejer mis noches de insomnio. El amor también ha provocado que no duerma a veces, quisiera tener un solo indicio de él
y eso me bastaría. Qusiera tenerlo conmigo sabiendo aun se revierta en mi contra.

Es un juego de pronto aparentemente fácil, el amor podría aseverar "cuenta hasta diez y búscame" y a obscuras pareciera que lo hiciera torpemente, preguntando "estas ahi?" y el amor solo saliera riendo del escondite. El amor en estos tiempos parece que es el zapato que me aprieta, el vestido que por más que afianzo me queda flojo. Es como el agua, tibia es como el fuego volátil, a veces duro como el cristal y frágil, me juega sus pasadas.

Me encantaría que alguna vez viniera de una buena vez y me sorprendiera y me colocara en el sitio adecuado, pero bien se que se ha vuelto furtivo en un continuo huir de entre mis manos. A veces, puedo soñar que al bajar de una escalera incauto, reposa, se adormece y se abandona en un pequeño recipiente, entonces secretamente llegamos él y yo, y calladitos bebemos hasta saciarnos. (pero soñar tal vez no hace quedarnos satisfechos siempre)

El amor provoca que sea inevitable hablar de el. Uds si lo tienen cerca, tienen suerte de conocerle porque yo tengo las manos vacías, quisiera un billete para cruzar el charco y decirle a él todas estas cosas justo frente a ese mediterráneo maravilloso, quisiera decirle que aqui el día del amor casualmente será insoportable.