El principio

Un año, Un año dando tumbos, un año llorando, un año que ha sido hasta ahora tumultuoso, terrible, lleno de pérdidas, de sorpresas, de desengaños, de silencios , soledades, de adioses mal concertados, de alegrías, de inspiración, de consuelo, de sospechas huecas de promesas rotas de ilusión de desilución , de contrastes y de encuentros .
Hoy me ha llamado después de casi un año de separarnos, en terminos generales tendria que remontarme a los antecedentes de toda esta historia, hace 3 años lo conocí y fue tanto como esas cosas que solo crees que pasan en las peliculas, casi puedo afirmar que fue amor a primera vista nunca me ha vuelto a pasar y dudo que suceda de nuevo, ya nunca fui la misma, no soy la misma.

De un tiempo a esta parte no he contado de lleno el porque estoy aqui escribiendo me han asaltado de pronto una serie de sentimientos revueltos la verdad es que yo comenzé a escribir desde mucho tiempo atrás pero siempre fue tras bambalinas, nunca he sido de llamar la atención

Ya le conocía de antes, me topé una vez con èl y charlamos amenamente, casi nos orinamos de risa esa primera vez la quimica se dió instantaneamente me pareció un tipo inteligente, ameno, reía con el todo el tiempo, guapo de modo muy hábil me pidió el teléfono, terminé dándole el de mi casa y el del móvil con lo incredula que siempre soy asumí que solo había sido un cumplido, un acto de amabilidad alguien como él como podria llamarme... ni en sueños.
Un par de semanas después lo hallé en mi auricular sorpresivamente, hubo incluso dos o tres noches enteras que estuvimos hablando casi como una adicción y dos meses seguidos de correspondencia epistolar en mensajes de texto y correos, aun cuando hablaramos de modo cotidiano. Cuando salí por primera vez con el parecía que yo flotaba y aún con lo nerviosa que yo estaba mantenía mi cordura fija y muy objetiva. Pero el amor no puede ser tan racional, es demasiado pedir serlo cuando las cosas surgen sin tener porque explicarlo podía pasar horas enteras con el charlando de todo y todo el tiempo estabamos riendo, con ocurrencias que al unísono completaba alguno de los dos.

El primer encuentro fue de súbito y yo tenía tanto miedo ni siquiera estaba planeado. El estómago me parecia un nudo encogido bastó una llamada a media tarde y los dos deseando al mismo tiempo vernos, fui osada al proponerlo asi que me atavié de valor y le dije si era posible, el dijo que no debia esperar mas tiempo, concertamos un punto medio cada cual llegaría y solo una hora bastó de trayecto. Creo que ya era justo . El Palacio de Bellas Artes se veía imponente, la tarde nublada a pesar de estar en pleno mayo, yo llegué antes y en vez de instalarme, los nervios me pedían incesantes correr al baño inoportunamente.

Me meti al establecimiento que queda justo enfrente "Sanborns" después compré unos dulces dos llamadas perdidas y un mensaje al móvil inquieto en mi bolsillo repicando "¿donde estás? haz llegado?"
No pude contenerme y marqué el teléfono de inmediato nerviosa, agitada ni siquiera un hola, contesta

el: ¿Donde estás?

> Estoy en el Sanborn´s de enfrente voy saliendo, no te veo tratando de atravesar el cristal que me separa de la calle

el: Voy por ti, no te muevas.

Apenas cuelgo en la puerta sus ojos se topan con los mios ¡hola! al mismo tiempo exclamámos y sonreimos no olvido esa sonrisa como de niño que tiene, la mirada tierna, alegre, su cabello castaño con ligeros toques de luz y su barba cerrada que le tapa casi toda la cara. Mis piernas tiemblan, yo tiemblo, no me deja bajar los dos escalones que faltan me toma de la cintura y me abraza
tomamos esa calle sucia llena de gente y de coches la verdad es que no tome en cuenta nada yo flotaba, solo soy consiente del contacto de su mano que toma la mia y caminamos aparentemente era lo unico que me mantenia en tierra.
- reia para mis adentros - me saca mucho de estatura pensaba. De pronto el alto nos anuncia que debemos parar esta el siga para los coches avanzan como en desfile y cuando volteo para preguntarle -no me acuerdo que- el ya me está plantando un beso en medio de toda esa multitud, claxons y gritos de vendedores ambulantes, su mano sosteniéndome la cara en un instante mágico como para detenerlo, revivirlo ahora en el recuerdo me vuelve a enganchar en el anzuelo.

Seguimos el camino obligados por el rojo del semáforo, es nuestro turno para seguir andando, no sé muy bien a donde vamos, no me acuerdo en que orden pero hablamos de lo cotidiano, de el tráfico, de libros, del clima, del día, de política (nada raro a eso se dedica), nos vemos cada tanto con miradas oblicuas al siguiente año habrá elecciones, me cuestiona si soy del azul, anticipo que si digo que si me lo recriminará, yo le reclamo porque es del verde? terminamos riendo con sus ironías, propone tomar algo, indaga si me apetece algo fuerte... yo propongo que algo caliente, volvemos a reir, no se trata de ninguna proposición indecente solo un Café. Andamos como peregrinos y no hay un solo sitio que tenga una mesa y dos sillas libres, todo el mundo se ha puesto de acuerdo, hay rios de gente por doquier mas de lo normal creo yo no hay ningún rincón vacio o libre ni siquiera entre nuestras manos.

Llegamos hasta el Majestic Un hotel antiguo que da hacia el Palacio Nacional, en el pleno corazón de la ciudad. Algunas luces comienzan a aparecer en las farolas de la calle Madero, esa noche Silvio Rodriguez brinda un concierto gratis, ya caigo porque tanta gente... le sigo aun sin saber en que sitio estoy, se que es un hotel pero no reacciono pronto, bromeo y digo que la propuesta de tomarnos algo caliente se lo ha tomado muy en serio, como siempre me responde con algo inteligente me sonrie y subimos hacia el elevador un señor ataviado en personaje de los años 40´s con botones al frente nos sube apretando el botón que indica terraza... a mi me parece mas bien un mirador, senti cierto vértigo confusa, pienso que debió ser mi imaginación. Otro personaje se acerca creo que es el anfitrión nos guia hacia una mesa todo esta completo un pequeño espacio en ese rincón para dos... que suerte.

La catedral se mira bien desde ese costado, sentados frente a frente me separa una mesa larga, me mira y se da cuenta que no estoy convencida, me guiña un ojo - no es un buen lugar el que nos ha tocado, yo queria allá enfrente pero mira, se ha llenado, dice - ¿nos quedamos?

>¿podemos ir a otro lado? hago mi pregunta impertinente
y enseguida se para y me toma de la mano, atropellamos al mesero que desconcertado no sabe porque nos vamos, el elevador baja mas rápido como si adivinara de el tiempo que corre tirano contra nosotros, terminamos regresando todas esas calles llegamos a Bellas Artes de nuevo, casi como en profecía a encontrarnos con nuestros sentidos.... me mira y me pide que le explique la arquitectura de ese edificio enfrente, y ese otro y aquel cada que termino continua con otra pregunta, no se si en algun momento dijo una mentira piadosa y me endulzó el oido pretextando que amaba escuchar de lo que le hablaba, me besa por segunda vez todos esos edificios son testigos dura mucho tiempo, puedo percibir mejor la temperatura de sus labios, el sabor, su movimiento después me besa los dos ojos, se levanta me jala de la mano caminamos la acera de enfrente y terminamos justo en otro Sanborns, al costado del Palacio frente a la Oficina de Correos, en Tacuba, vamos al segundo piso y tomando la mesa del rincón nos instalamos.

Ahora somos mudos, solo hablan las tazas de café que desfilan con el respectivo litro que las va llenando, los besos, las miradas, los abrazos, los silencios y preguntas vagas cada tanto entre todo eso. Descubri otro poco mas de el, fuma como loco, el porque estudió ciencias políticas, que es huérfano de madre, porque es rebelde, es muy libre, un poco duro de roer, dificil de hurgar en su interior para saberse vulnerable y que tiene una mirada dulce que hace juego en perfecto contraste con su incisivo y negro humor. Adora a Sabina igual que yo

Quizá todo ese misterio del que se rodeó en ese primer instante no se si como protección sea el que ocasionó que yo quedara atrapada y que hasta hoy no haya cambiado mucho lo que me ocasiona en el corazón. El tiempo es tan injusto miro el reloj y debo partir, el asiente que será lo mejor ya es tarde, el camino es largo, me mira y sonrie otra vez de ese modo encantador, bromea con el mesero, bromea con la pareja de viejitos que esta enfrente que no han parado de mirarnos.

>verdad que nos vemos bien'? les pregunta y los señores nos sonrien.

paga la cuenta y salimos, caminando por delante presiento su mirada clavada en mi, otra vez las piernas me tiemblan, sería pesimo si resbalara ahora, el aire golpea nuestra cara y mientras decidimos el camino atravesamos la Av. Tomamos un taxi, en el trayecto siento su mano en mi mano... solo le damos instrucciones al conductor y nos desentendemos de el, otra vez los besos, siento su mano en mi rodilla tiemblo, la ciudad parece vacía, no se si es por la hora o por el espejismo que me causa el solo con su presencia.
esa noche fue magnifica, al llegar a casa el teléfono ladraba y me sorprende que sea el apenas unos minutos de entrar a mi casa.

Si de confesiones se trata quizá pudimos haber terminado esa noche juntos , asumimos que lo deseamos pero acatamos que fue sin duda lo mejor. Hay mas tiempo, no tenía que ser hoy, tuvo que pasar un año para eso;no hay reglas ni protocolos dice "lo unico que quiero es volver a verte"

Una semana después volvimos al trabajo el se quedaba en la Ciudad y a mi el destino me llevaba fuera de aqui. Los bombardeos y los mensajes siguieron, los besos altaneros como bien decía el, solo obedecían a cada uno de nosotros.
Ha pasado tiempo, hemos compartido cosas de vida, cosas cotidianas, alguna que otra herida, malos entendidos que no han sido culpa mia, el tiempo es sabio y a ambos nos ha colocado en sitios diferentes hoy, pero siempre volteo y aparece el de nuevo, no le tengo rencor, todo lo contrario a pesar de los pesares, las distancias...hay cosas aclaradas y otras preguntas rotas a medias, sigo armando el rompecabezas, me ha dicho que soy genial, que extraña verme hablamos como antes yo le quiero como el primer dia alguna vez me dijeron que era malo aferrarse, en cuestión de amor no soy muy inteligente creo que muy terca. Ya no me aferro, convencida estoy,le escuché muy centrado, tan familiar como tantas veces, sincerandose como casi nunca, asumiendo errores pasados. no se si ponerle "arrepentido" ... la vida le ha dado lecciones este ultimo año, "baile con el diablo" me ha dicho. yo me repito que este año ha sido rudo conmigo.
Desde ese día no he dejado de escribirle, el ha sacado lo peor y lo mejor de mi y tengo 200 cosas guardadas que son solo suyas . Dice que me ha extrañado, que ha sido poco sincero con el, no quize indagar mucho, hay mas tiempo pensé, Yo solo queria saber de el... se desapareció mucho tiempo y me dejo en la incertidumbre pasaron acontecimientos que de ser ciertos creo que podria odiarle, pero no puedo hacerlo, le he dicho que yo queria saber que estaba bien de pronto mi silencio me delata entro en un shock repentino. Creo que cuando quieres a veces eso es suficiente saber que estas bien. Creo que no le sorprende porque el sabe lo que siento, yo siempre he sido transparente con el, aunque ya no le dejo ver mucho, he aprendido a amordazarme prudentemente, entre bromas, ponernos al tanto el uno del otro parece que este tiempo lo ha hecho reconocerse y me alegra saberlo. Me alegra saberle bien me siento feliz afirma "estoy vivo, completo..." ¿vamos al cine?"; El tiempo me ha separado de el por lapsos y rachas, por acontecimientos y por ciertos desengaños, hay personas que mucho no entienden y siempre como edicto sucede lo que esa primera vez me dijo; Hace un momento colgé y volvió a repetirlo como un conjuro "lo unico que quiero es volver a verte"
sonreí e imediatamente retumbó para mis adentros lo que le escribí la primera vez.

"La música no miente.Los árboles no mienten.Los ojos tristes del animal no mienten.Únicamente mienten las palabras.¿Cómo decirte la verdad con ellas?
Qusiera hablarte con los ojos del perro,dar frutos como el árbol,llegar a ti con la delicia y la escondida lágrima de Mozart.
El esplendor de la verdad: belleza la que mis palabras, torpemente,procuran acercarse.

Es imposible.Tan lejos y tan cerca

Mis palabras enmudecen con tu ausencia.....

Me alegro de saberle bien, parece que alguien allá arriba me escuchó de nuevo, la intuición es engañosa por lo pronto no quiero ser su victima, temo que me callaré lo que estoy pensando me he extendido demasiado y quizá no estén para historias mas largas, como es de extraña la vida
escribiré después todavia faltan muchos versos, dos terceras partes... y el reencuentro tal vez un fin.