Hay días que lo que más cuesta es decidir y quisieras hasta escoger el color de las aceras, del aire, del tendero de la esquina o el color del perro de la vecina.
Lo único que te falta es un pincel para escribir y una pluma para pintar. Hay días de colores y otros monocromos, no sabes porque amanece tan gris si hace días los atardeceres eran como del color mandarina o del tono de un vino rosado.
Debe ser eso,en tu paleta de pronto se tiñe de todo aquello que ya no podrá volver.
4 solo lo soñaron:
hoy es uno de esos días sin color
Bueno, será cuestion de salirse de las normas, ignorar lo que las normas Pantone indican... e inventar colores.
Lo bueno de los días grises es que nos dan la oportunidad de pintarlos del color que queramos. Un besote!!!
Y no queda otra solución que esperar a que pase la tormenta.
Besos.
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