Cuenta una leyenda que existía una bella doncella llamada Lidia, quiso medirse a la altura de los dioses y retó a la Diosa Atenea a tejer unos tapices. Las dos habilidosas damas en el arte de tejer parecían tener suficiente vanidad por igual para querer demostrarlo.
Atenea preparó el suyo relativo a su Ciudad pero Lidia usó su habilidad para representar escenas de las infidelidades de Zeus. Lidia comezó a burlarse ante el aparente éxito, y Atenea tocó la frente de la muchacha y ésta se arrepintió de haberse burlado de los dioses. Inmediatamente se suicidó pero la diosa se apiada y le devuelve la vida en forma de araña.
Las mitologías antiguas convertían en divinidades guerreras a diosas virgenes o casadas. El mito parece tener una función de tipo moral. "no es conveniente molestar a los dioses" Ahí parece acabar todo, pero es posible, sin embargo rastrear otras pistas que relacionan esta historia con el auténtico mito de la aracné condenada a tejer por toda la eternidad.
La relación entre Atenea y la Araña no es precisamente algo accidental, la diosa está siempre relacionada con actividades domésticas y es protectora de oficios tales como hilar y tejer, y es a veces cuando lo de araña lo dicen como insulto, lo consideran a ese insecto incluso yo misma repulsivo, y sin embargo, aunque pueda ser tramposa y engañadora, es un animal capaz de conseguir lo que no en tamaño y fuerza.
La estructura geométrica en esas construcciones de su tela, las hacen hilvanadoras perfectas pegadas a su destino. Incluido el arraigo del lado oscuro del sex, irresistible y debil para los machos que se acercan a ellas y que de manera dominante ella ejerce el control. El placer y el peligro la convierte en una experta cazadora, que con astucia debe diseñar trampas invisibles o engaños pues el placer le indica que su obtención sea una presa o un encuentro sexual, deberá acabar del mismo modo.
La forma de deslizarse como si bailara, la gracia y precisión, como buscando seducir y su fertilidad que muchas veces no parece relacionarse con la cópula del macho habitualmente más pequeño y menos perceptible en sus costumbres.
Hay arañas hermosas, y tramperas, otras elegantes o embusteras. Tal vez no viene bien que yo analize porqués, pero si voy a desearle el mal a un caballero que me ha hecho daño, no creo que se encuentre una araña(otra mujer) peor, realmente trabajadora o inteligente hay quien no merece ninguna.
5 solo lo soñaron:
El tema está vinculado con hibris, la desmesura. El drama estuvo en haberle ganado a Atenea. Si hubiera perdido, habría pasado lo mismo. Y eso que Atenea era razonable, dentro de todo.
El riesgo estaba en el desafío. Recuerdo vagamente el mito de un musico que desafió a las musas. Por perder, fue privado de la vista y el talento. Además de la frustración de no haber ganado el premio, que eran las musas mismas.
Jo, pareces Lobezna, peor que una araña...
Ese caballero lo va a pasar mal.
Besos.
Uy pero es que ese caballero ya está! Esa araña seguro es de temer.
Lo has contado de una manera deliciosa!
Beso!
Atenea era una zorra suprema. O sea, "venga, si hagamos una competición, y como he perdido, hago que te suicides, y no contenta con ello, no dejo que descanses en paz, sino que te devuelvo a la vida en forma de araña". ¿Que te faltó? ¿Meterla en un tarro de cristal para la eternidad? Cuidadín con la diosa de la sabiduría... también debería haber sido diosa de "Tomarse mal las cosas" o diosa de "la venganza desproporcionada".
Un beso.
Como la salvaje dama de El cuarto hombre de Verhoeven...
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